Bushueva Kseniya

Hola, me llamo xenia y yo soy un artista.

Dibujar estaba en la escuela, en un lugar con dos años de edad. Pero yo y mis padres, recordamos un evento muy brillante.

Todo empezó con muy divertida hubo el accidente. Así como yo no era caprichoso niño, a menudo me dejaban sola, no sobreviviendo, acerca de las consecuencias. En esta ocasión, creo que fue precisamente en el mismo escenario. Pero entonces, decidí ir a todo serio.
Me dejó en mi mismo un mundo imaginario, que se han ido en el tranquilo estado de ánimo, ni de que no sobreviviendo.
Su llegada me había preparado, que podría mostrar mi obra.
Al entrar en la habitación, su sorprendió lo que habían visto. Su hija, que estaba sentada en el centro de la habitación y sonrió radiantemente.
Por el perímetro de las cuatro paredes (que acaba de pintadas, hace apenas unos días) fueron pintadas en el солнышки con la que aspiran los rayos en todas las direcciones.
Así comenzó mi carrera.

Conscientemente pintaba yo años con once.
Papel, lápiz, Anime & manga(que no me miraba). Estas obras de comprar junto con los carteles de Tokyo hotel de revistas para adolescentes.
Estudió en la escuela de música, donde yo no entendía nada.
Me llevaron a la escuela de arte, donde no me han tomado, con las palabras: "Usted no nos cumple, ya que usted no sabe dibujar colores". Ahora, al recordar aquel momento, esto me divierte.
Al llegar a moscú, me hago a la facultad de Diseño de Interiores, donde de nuevo doy cuenta de que dibujar sobre los cánones y de debajo de los palos no puedo. Siempre me irriten el marco en el que concluyen el arte.
Al final me quedo sin educación, a solas con el lienzo.

Yo pintaba estética tel.
Juegos de amor.
Después de un lápiz me ha pasado en la acuarela, representando los retratos imaginarios de las chicas.
Luego en mi vida apareció acrílico.
Y me enamoré.
Dibujo, pasando noches en vela, hemos realizado estos momentos de los dos, representando el cosmos, los campos de lavanda, las montañas, los mares, los bosques. Hemos sido felices juntos. Casi todas las pinturas fueron donados por mí los amigos, de la vida pasada.
Luego hice una pausa -, gracias a las personas que han apagado mi fuego.
Me ha resurgido de sus cenizas, al mundo sus mejores obras.
Ha pasado otro año, cuando no podía crear.
Y aquí llegamos a la fecha.
Cuarentena...
La autarquía...
Yo me decidí a probar a escribir el aceite.
Completamente nuevas sensaciones. Me gustó, nunca pintaba con este gran atención.
He llegado a amar y su.
Me gusta encontrar a sí mismo en la imagen nueva y estoy segura de que no es el límite.
Todas las obras de mi cartera, en este momento, han de aceite.
Estoy verdaderamente realizado en el arte. Y les pido que valorar esto.