Esta obra es la primera de una serie de pequeñas pinturas dedicadas a las flores en jarrones.
El motivo principal es un color turquesa tan diferente. En algún lugar estará más cerca del azul, en algún lugar del verde.
Los colores son brillantes y emocionales. El fondo es oscuro y con reflejos contrastantes.
Las flores en sí mismas no se prestan exactamente a la descripción y la pertenencia a algo específico. Quería captar el brillo y la forma para que todo estuviera cerca de las palabras y los conceptos: extraño, Postimpresionismo con brillo, fauvismo con claridad vaga y algo muy remotamente antiguo en el jarrón.
Ubicación de la imagen:
Moscow
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