En este trabajo, volví al gato negro en el techo que observa lo que sucede. A sus lados hay paredes y una ventana.
Y abajo está la ciudad costera. A lo largo del terraplén, la gente va hacia el mar. Cerca de las montañas y los árboles que se elevan junto con la ciudad. En algún lugar a lo lejos, pequeños barcos y veleros. Las gaviotas flotan despreocupadamente en el aire.
El cielo es cambiante, como nubes esponjosas, como nubes que se avecinan. Y parece que el gato lo siente, lo que se ve en su mirada. Es como si estuviera vigilando el cambio de clima como un guardián.
Ubicación de la imagen:
Moscow
Si no tiene una cuenta en nuestro sitio web, debe registrarse.